Olor a Rosas
De todos es sabido desde hace muchos años que muchos son los que hemos sentido ese Olor a Rosas, con lo que la Santísima Virgen da señales de su presencia.
Este fenómeno tan emocionante desata en quien lo siente una cercanía a lo divino. Hay experiencias colectivas, en grupo y también personal, en el que solo lo sienten los afortunados.
Me gustaría poner en este apartado a todos los que nos remitan su testimonio para que todos participemos de la cercanía de la Santísima Virgen María.
Se entiende que la Santísima Virgen al hacerlo tan personal no llega a nuestro conocimiento, pero que estamos seguros que se producen más de lo que podamos pensar.
Este fenómeno tan emocionante desata en quien lo siente una cercanía a lo divino. Hay experiencias colectivas, en grupo y también personal, en el que solo lo sienten los afortunados.
Me gustaría poner en este apartado a todos los que nos remitan su testimonio para que todos participemos de la cercanía de la Santísima Virgen María.
Se entiende que la Santísima Virgen al hacerlo tan personal no llega a nuestro conocimiento, pero que estamos seguros que se producen más de lo que podamos pensar.
Lunes, 18 de septiembre de 2017
Un matrimonio en el que el marido estando en el hospital de repente sintieron un Olor a Rosas suave pero que persistió unos minutos, sintiéndolo los dos y eso que el marido estaba en aislamiento y ella con mascarilla, esto les lleno de esperanza y alegría. Así nos lo contaba ella.
Domingo, 28 de enero de 2018
Dos personas, madre e hija en la cuadra y acercándose a la Imagen de la Santísima Virgen Dolorosa, sintieron Olor a Rosas, rompiendo a llorar de alegría. Quede esto, como testimonio de quien fue testigo.
Domingo, 30 de junio de 2019
Un matrimonio, subiendo desde la casa de la Virgen al pozo por el sendero que bajó la Virgen en su día, la mujer Olio a Rosas por todo el camino hasta el Pozo bendecido por la Virgen para curar enfermos y sanos. Su esposo a los pocos días también sintió el Olor a Rosas, pero en un pequeño tramo del camino de la Virgen que sube al pozo. Ellos me lo contaron diciéndome si con ello la Virgen le decía que la había curado. No podemos decir que eso sea causa efecto de confirmación de estar curada, eso solo le corresponde a la Santísima Virgen. Lo que sí podemos asegurar que en ese momento la Virgen se hizo presente, como queriendo decir que no esta sola, que Ella le acompaña en la vida. A su marido entiendo que para que no dudara de su esposa y que él también no está solo.
Jueves, 2 de abril de 2020
Anoche en la madrugada no recuerdo bien la hora pero fue de 2 a 3 de mañana y me dispuse a hacer la oración de la Divina Providencia y sentí un aroma a rosas muy agradable me dispuse a buscar entre el altar cito y no encontré que podía ser pero si sentí ese aroma de rosas tan exquisito.
Recibido el 02/04/2020 5:48 por, Alicia G.R.
Amén Dios y la Virgencita María y los ángeles celestiales están conmigo y mi familia y de todos los demás que necesitan.
Recibido el 02/04/2020 5:51 por, Alicia G.R.
Respuesta:
Me alegro muchísimo de la noticia en la que el Señor estaba contigo y tu familia y como estará con todos los que sufren. El olor a rosas, sinónimo de la presencia del Señor Jesús o bien de María o de ambos, y con su presencia conforta a quien está orando. Ellos, siempre presentes en nuestras oraciones, conforta saber que ellos están ahí y que escuchan.
Mi alegría es infinita por la noticia, doy gracias a Jesús y María por esta gracia que has recibido y por haberme hecho participe. Un fuerte abrazo y sigue ese camino de luz que es lo único que importa. Puede que tardes mucho tiempo en volver a oler o no vuelvas a oler el olor nunca más, pero que tengas seguridad que ellos siempre te escuchan. Que sepas que si intentas olerlo cuando tú quieras es muy difícil olerlo porque siempre el Señor o María lo hacen por sorpresa. Pero no por ello quiera decir que no te escuchen, sigue con tus oraciones y siempre.
Recibido el 02/04/2020 5:48 por, Alicia G.R.
Amén Dios y la Virgencita María y los ángeles celestiales están conmigo y mi familia y de todos los demás que necesitan.
Recibido el 02/04/2020 5:51 por, Alicia G.R.
Respuesta:
Me alegro muchísimo de la noticia en la que el Señor estaba contigo y tu familia y como estará con todos los que sufren. El olor a rosas, sinónimo de la presencia del Señor Jesús o bien de María o de ambos, y con su presencia conforta a quien está orando. Ellos, siempre presentes en nuestras oraciones, conforta saber que ellos están ahí y que escuchan.
Mi alegría es infinita por la noticia, doy gracias a Jesús y María por esta gracia que has recibido y por haberme hecho participe. Un fuerte abrazo y sigue ese camino de luz que es lo único que importa. Puede que tardes mucho tiempo en volver a oler o no vuelvas a oler el olor nunca más, pero que tengas seguridad que ellos siempre te escuchan. Que sepas que si intentas olerlo cuando tú quieras es muy difícil olerlo porque siempre el Señor o María lo hacen por sorpresa. Pero no por ello quiera decir que no te escuchen, sigue con tus oraciones y siempre.
Lunes, 5 de octubre de 2020
Visite con mi hermano la capilla de la Virgen el Lunes al mediodía. Llegamos sobre las 14:00 hs. y esta cerrado. Esperamos a que la abrieran y sobre las 15:00 hs. llego un señor que nos abrió y pudimos entrar a rezar.
Previamente habíamos lavado nuestras manos y llenado una botella de agua de la fuente para llevarla a nuestra casa.
Tras unos momentos de oración pudimos ver la capilla de abajo de la antigua cuadra. Allí mi hermano y yo pusimos unas velas y rezamos y pedimos por la familia y la salud de todos.
Mas tarde mi hermano salió y fue a la fuente a verla de nuevo y yo acudo al servicio de abajo. Cuando subo de nuevo, ya solo a la capilla antes d entrar me dio un gran olor a rosas, llevaba la mascarilla puesta e inicialmente no pensé nada... me la quite y el olor a rosas era mucho más intenso. Emocionado llame a mi hermano -Ven corriendo le dije, -ven, ven- señalándole con la mano que se diera prisa.
Quería saber si el olía a rosas como yo. Pero el no las odia. Entre de nuevo a la capilla y volví a salir y note que el olor de las flores de dentro era diferente al del olor a rosas de la entrada de la capilla,
Le pedí a mi hermano que de nuevo lo comprobara pero el no olía nada. Le dije: -Que pena, podrías haberlo comprobado tu también.
En ese instante me di cuenta que la Virgen esta allí conmigo y qué era su gracia la que me había elegido para notar su presencia.
Como un niño, acudí a prisa al hombre que nos había abierto la Capilla a las 15:00 hs. y le conté los que me había ocurrido, le conté: - he olido a rosas a la entrada de la Capilla. eso es normal?, le ha ocurrido a más gente?, le volví a preguntar como esperando una respuesta.
Me dijo: - Si, le ocurre a algunas personas- y surgió un silencio.
Sin más que decir me di media vuelta y al salir de nuevo volví a oler a rosas ya menos intenso. Emocionado casi a punto de llorar, me contuve y respire tranquilo e intente disfrutar del momento. Empecé a darme cuenta de la situación.
Alterado volví a entrar a la Capilla y salir varias veces pero mi hermano no lo olía yo si, Quería comprobar que el olor a rosa que percibía, no era a mí solo.
Mi hermano se fue a la fuente a lavarse de nuevo y después de rezar un rato nos preparamos para irnos.
El se quedo en la fuente y yo fui por nuestro coche, me paré en ella y aparque un junto a los chorros de agua. Me bajé y me volví a lavar y empecé a mirar al cielo, a la luz del sol entre los arboles, como queriendo ver a La Virgen mirándome y queriendo hablar con ella como un hijo con su madre, mi alegría era enorme, estaba emocionado, .... y en ese instante mi hermano me llamo y llego donde estaba. Reconozco que me interrumpió aquel momento mágico, pero lleno de paz le dije que se preparara para irnos. Los dos nos volvimos a lavar.
Cuando entre en el coche para irnos, de nuevo, volví a oler a rosas, mi sensación se multiplico y me di cuenta que las manos y la cara me olían de nuevo. Le pedí a mi hermano que oliera las manos y la cara y comprobó que era cierto y que me olían a rosas, era muy intenso. En aquel momento el si lo olió.
Repetidamente le insistí y le decía: -huéleme, por favor, es verdad? Yo dudaba que fuera solo a mí, quería comprobar que era cierto.
El olor en mis manos y mi cara era intenso.
El agua con la que me había lavado también olía a rosas.
Sorprendido por un lado y gozoso y alegre por otro nos dispusimos a irnos. Arranque el coche y nos fuimos.
Mi hermano y yo, no pronunciamos una palabra hasta la salida en la carretera a Guecho, hacia donde íbamos.
Mi hermano me dijo: -La Virgen te eligió a ti, tienes algo especial, por algo será- Ya no volvimos hablar más de lo ocurrido.
Me hubiera gustado que a él también le hubiera pasado, por muchas razones.
A la noche al llegar al hotel donde nos alojamos, recé y recé, pero no encuentro más explicación que mi devoción a la Virgen a quien rezo a diario, todas las noches.
Gracias Madre mía por cubrirme con tu mando.
Relato recibido el 8 de octubre de 2020 por, Alfredo Miguel R.L
Respuesta:
Me alegro muchísimo que haya compartido su experiencia. Es común en Umbe el olor a Rosas aunque nos gustaría que abundara más. Son varios los casos que he presenciado y vivido en primera persona. De todos considérese afortunado por haberlo sentido, pues hay mucha gente que no han tenido esa gracia, donde es señal clara de la presencia de la Santísima Madre, y que ha querido que sea notada su presencia, el hecho de que su hermano no lo oliera, también es común, porque la Santísima Virgen así suele actuar para que sea evidente de que es una gracia, si hubieran olido los dos pudieran pensar que estaba en el ambiente, así de hace notar mejor la gracia, de todos modos si seguís viniendo puede que se dé al contrario o bien que ambos lo percibais sin con ello decir que quien no lo ha percibido no le ha recibido la Virgen con la misma gracia, de todos modos Ella sabrá, mi experiencia es qué tal si volvéis podrá pasarle a tu hermano. Ánimo pues es la Madre de todos y no desprecia a nadie. Es una experiencia que nunca se olvida y que ha de ser motivo de fe en María, un empujón a seguir a María y lo que representa para toda la humanidad. Es un regalo que obliga a ser creyente pues no todos lo han percibido y del que hay que dar testimonio con una vida de fe, para eso ha venido a Umbe para dar fe y esperanza en el más allá, y para que con tus oraciones la ayudes a salvar muchas almas necesitadas de conversión, como así lo pidió en sus apariciones.
Qué todo esto os estimule de verdad para que estéis dónde estéis no olvidéis de que necesita de todos nosotros para cumplir su gran labor de amor y salvación.
Un fuerte abrazo de un peregrino como vosotros y que Jesús y María os bendiga.
Previamente habíamos lavado nuestras manos y llenado una botella de agua de la fuente para llevarla a nuestra casa.
Tras unos momentos de oración pudimos ver la capilla de abajo de la antigua cuadra. Allí mi hermano y yo pusimos unas velas y rezamos y pedimos por la familia y la salud de todos.
Mas tarde mi hermano salió y fue a la fuente a verla de nuevo y yo acudo al servicio de abajo. Cuando subo de nuevo, ya solo a la capilla antes d entrar me dio un gran olor a rosas, llevaba la mascarilla puesta e inicialmente no pensé nada... me la quite y el olor a rosas era mucho más intenso. Emocionado llame a mi hermano -Ven corriendo le dije, -ven, ven- señalándole con la mano que se diera prisa.
Quería saber si el olía a rosas como yo. Pero el no las odia. Entre de nuevo a la capilla y volví a salir y note que el olor de las flores de dentro era diferente al del olor a rosas de la entrada de la capilla,
Le pedí a mi hermano que de nuevo lo comprobara pero el no olía nada. Le dije: -Que pena, podrías haberlo comprobado tu también.
En ese instante me di cuenta que la Virgen esta allí conmigo y qué era su gracia la que me había elegido para notar su presencia.
Como un niño, acudí a prisa al hombre que nos había abierto la Capilla a las 15:00 hs. y le conté los que me había ocurrido, le conté: - he olido a rosas a la entrada de la Capilla. eso es normal?, le ha ocurrido a más gente?, le volví a preguntar como esperando una respuesta.
Me dijo: - Si, le ocurre a algunas personas- y surgió un silencio.
Sin más que decir me di media vuelta y al salir de nuevo volví a oler a rosas ya menos intenso. Emocionado casi a punto de llorar, me contuve y respire tranquilo e intente disfrutar del momento. Empecé a darme cuenta de la situación.
Alterado volví a entrar a la Capilla y salir varias veces pero mi hermano no lo olía yo si, Quería comprobar que el olor a rosa que percibía, no era a mí solo.
Mi hermano se fue a la fuente a lavarse de nuevo y después de rezar un rato nos preparamos para irnos.
El se quedo en la fuente y yo fui por nuestro coche, me paré en ella y aparque un junto a los chorros de agua. Me bajé y me volví a lavar y empecé a mirar al cielo, a la luz del sol entre los arboles, como queriendo ver a La Virgen mirándome y queriendo hablar con ella como un hijo con su madre, mi alegría era enorme, estaba emocionado, .... y en ese instante mi hermano me llamo y llego donde estaba. Reconozco que me interrumpió aquel momento mágico, pero lleno de paz le dije que se preparara para irnos. Los dos nos volvimos a lavar.
Cuando entre en el coche para irnos, de nuevo, volví a oler a rosas, mi sensación se multiplico y me di cuenta que las manos y la cara me olían de nuevo. Le pedí a mi hermano que oliera las manos y la cara y comprobó que era cierto y que me olían a rosas, era muy intenso. En aquel momento el si lo olió.
Repetidamente le insistí y le decía: -huéleme, por favor, es verdad? Yo dudaba que fuera solo a mí, quería comprobar que era cierto.
El olor en mis manos y mi cara era intenso.
El agua con la que me había lavado también olía a rosas.
Sorprendido por un lado y gozoso y alegre por otro nos dispusimos a irnos. Arranque el coche y nos fuimos.
Mi hermano y yo, no pronunciamos una palabra hasta la salida en la carretera a Guecho, hacia donde íbamos.
Mi hermano me dijo: -La Virgen te eligió a ti, tienes algo especial, por algo será- Ya no volvimos hablar más de lo ocurrido.
Me hubiera gustado que a él también le hubiera pasado, por muchas razones.
A la noche al llegar al hotel donde nos alojamos, recé y recé, pero no encuentro más explicación que mi devoción a la Virgen a quien rezo a diario, todas las noches.
Gracias Madre mía por cubrirme con tu mando.
Relato recibido el 8 de octubre de 2020 por, Alfredo Miguel R.L
Respuesta:
Me alegro muchísimo que haya compartido su experiencia. Es común en Umbe el olor a Rosas aunque nos gustaría que abundara más. Son varios los casos que he presenciado y vivido en primera persona. De todos considérese afortunado por haberlo sentido, pues hay mucha gente que no han tenido esa gracia, donde es señal clara de la presencia de la Santísima Madre, y que ha querido que sea notada su presencia, el hecho de que su hermano no lo oliera, también es común, porque la Santísima Virgen así suele actuar para que sea evidente de que es una gracia, si hubieran olido los dos pudieran pensar que estaba en el ambiente, así de hace notar mejor la gracia, de todos modos si seguís viniendo puede que se dé al contrario o bien que ambos lo percibais sin con ello decir que quien no lo ha percibido no le ha recibido la Virgen con la misma gracia, de todos modos Ella sabrá, mi experiencia es qué tal si volvéis podrá pasarle a tu hermano. Ánimo pues es la Madre de todos y no desprecia a nadie. Es una experiencia que nunca se olvida y que ha de ser motivo de fe en María, un empujón a seguir a María y lo que representa para toda la humanidad. Es un regalo que obliga a ser creyente pues no todos lo han percibido y del que hay que dar testimonio con una vida de fe, para eso ha venido a Umbe para dar fe y esperanza en el más allá, y para que con tus oraciones la ayudes a salvar muchas almas necesitadas de conversión, como así lo pidió en sus apariciones.
Qué todo esto os estimule de verdad para que estéis dónde estéis no olvidéis de que necesita de todos nosotros para cumplir su gran labor de amor y salvación.
Un fuerte abrazo de un peregrino como vosotros y que Jesús y María os bendiga.
Sábado, 30 de Mayo de 2020
El pasado sábado 30 de mayo de 2020, coincidiendo con el mes de la Virgen y después de su reapertura tras el confinamiento, acudí junto a mi hijo a Umbe. En aquel momento mi padre estaba ingresado en el hospital de Gorliz después de haber sufrido un grave ictus hemorrágico y nos acercamos para agradecer a la virgen todo lo que nos había ayudado y también para rezar allí por él. Recuerdo que primero estuvimos en la cuadra y a continuación subí descalza con gran devoción y orando por el camino que conduce al pozo. En ese momento sentí un olor a rosas que me sorprendió. Me sorprendió mucho porque no me lo esperaba y también porque llevaba la mascarilla y me parecía muy difícil percibir algo con ella puesta. Pero enseguida volví a notar el olor a rosas y me dí cuenta de que la virgen me estaba acompañando y que estaba a nuestro lado.
Cuatro años antes estuve yo sola junto a mi abuela en el hospital de Santa María cuando falleció y al despedirme de ella y abrazarla noté ese mismo olor intenso a rosas. En aquella ocasión el olor duró mucho más tiempo porque mis padres y hermana llegaron casi una hora más tarde y también lo notaron. En ambas experiencias yo veo una manera de la Virgen de decirnos que está junto a nosotros en los momentos difíciles.
Relato recibido el 1 de enero de 2021por, María P.L.
Respuesta:
Gracias por tu relato que ayudará a muchas otras personas a confiar en Jesús y María
Cuatro años antes estuve yo sola junto a mi abuela en el hospital de Santa María cuando falleció y al despedirme de ella y abrazarla noté ese mismo olor intenso a rosas. En aquella ocasión el olor duró mucho más tiempo porque mis padres y hermana llegaron casi una hora más tarde y también lo notaron. En ambas experiencias yo veo una manera de la Virgen de decirnos que está junto a nosotros en los momentos difíciles.
Relato recibido el 1 de enero de 2021por, María P.L.
Respuesta:
Gracias por tu relato que ayudará a muchas otras personas a confiar en Jesús y María