Testimonio resumido.
Fecha Testimonio: 29 de mayo de 1989
Nombre: Evaristo M. S. Ciudad: Ciudad Real Edad: 63
Enfermedad desde: 19 de febrero de 1989
Fecha curación: 19 de febrero de 1989
Utilizó el agua: 19 de febrero de 1989, en mi casa
Enfermedad, Dolencia: HECHOS OCURRIDOS CIRCUNSTANCIALMENTE
Ilustrísimo Sr. Obispo.
El indicado día 19 de febrero del corriente año, me encontraba en la lonja del pescado de esta Capital, y al desplazarme al almacén a por una caja de calamares, debido al mal estado del suelo (mojado, con grasa de pescado etc.) me resbalé cayendo de espaldas, ocasionándome con el golpe tan tremendo, dolores intensos por todo el cuerpo que no me dejaban moverme ni para lavarme las manos en los lavabos.
Acudí al médico el que me indicó una vez hechas las radiografías, que no podría ya cargarme en todos la vida con cosas pesadas.
Une vez en mi casa, utilicé el agua bendecida por la Virgen María Pura Dolorosa de Umbe, así como me pasé la estampa de la Señora, desapareciéndome todo, incluso los cardenales que con el golpe me produje, sintiendo un escalofrió especial y una sensación también especial, por todo el cuerpo.
Hoy hago mi vida normal sin más problemas como antes de tener dicha caída.
Por todo ello, quiero darle gracias a mi Madre María Pura Dolorosa.
Reconozco como verdaderos todos los datos y explicación de esta gracia, concedida por la Santísima Virgen Pura Dolorosa de Umbe.
Humildemente besa su anillo Pastoral, y se pone a su entera disposición para ampliar lo que desee.
Firmado: Evaristo M. S.
Informes: No se aportan
Nombre: Evaristo M. S. Ciudad: Ciudad Real Edad: 63
Enfermedad desde: 19 de febrero de 1989
Fecha curación: 19 de febrero de 1989
Utilizó el agua: 19 de febrero de 1989, en mi casa
Enfermedad, Dolencia: HECHOS OCURRIDOS CIRCUNSTANCIALMENTE
Ilustrísimo Sr. Obispo.
El indicado día 19 de febrero del corriente año, me encontraba en la lonja del pescado de esta Capital, y al desplazarme al almacén a por una caja de calamares, debido al mal estado del suelo (mojado, con grasa de pescado etc.) me resbalé cayendo de espaldas, ocasionándome con el golpe tan tremendo, dolores intensos por todo el cuerpo que no me dejaban moverme ni para lavarme las manos en los lavabos.
Acudí al médico el que me indicó una vez hechas las radiografías, que no podría ya cargarme en todos la vida con cosas pesadas.
Une vez en mi casa, utilicé el agua bendecida por la Virgen María Pura Dolorosa de Umbe, así como me pasé la estampa de la Señora, desapareciéndome todo, incluso los cardenales que con el golpe me produje, sintiendo un escalofrió especial y una sensación también especial, por todo el cuerpo.
Hoy hago mi vida normal sin más problemas como antes de tener dicha caída.
Por todo ello, quiero darle gracias a mi Madre María Pura Dolorosa.
Reconozco como verdaderos todos los datos y explicación de esta gracia, concedida por la Santísima Virgen Pura Dolorosa de Umbe.
Humildemente besa su anillo Pastoral, y se pone a su entera disposición para ampliar lo que desee.
Firmado: Evaristo M. S.
Informes: No se aportan
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